FocaKi, 2014
Muchas veces nos preguntamos ¿si los animales ven a colores o si ven cómo nosotros? Pero.....¿Sabías que los animales no ven exactamente cómo los humanos?
La visión de los animales puede cambiar según las necesidades de cada especie.
De hecho, la visión de los animales se combina con otros sentidos, pudiendo estar determinada por cuatro atributos: el color, la forma, profundidad y movimiento, que son dinámicas, según la especie.
Nuestros compañeros como son los gatos y perros tienen más desarrollados el oído y el olfato. Siendo que ellos pueden distinguir entre el azul, el amarillo y el marrón. Y cuando llega la noche, su visión es mucho mejor que la de los humanos. Tanto perros como gatos tienen mejor perspectiva y profundidad de campo que las personas, dada la ubicación de sus ojos.
Manual do Mundo 2015
Los pájaros pueden ver muchos más colores que nosotros porque tienen cuatro tipos de células "conos" en sus ojos (los fotorreceptores) mientras que nosotros tenemos tres. Además tienen capacidad para ver la luz ultravioleta.
A pesar de que los ojos de los tiburones son muy parecidos a los nuestros pues ambos tenemos retina, lente, iris, córnea y pupila nuestras habilidades visuales son muy distintas. Los tiburones carecen de conos retinianos, de modo que no detectan los colores. Además, el ojo del tiburón está diseñado para absorber la máxima cantidad de luz posible, para poder ver en aguas turbulentas. Sin embargo, y aunque puede ver objetos a 20 metros de distancia, su visión no es tan fina como la nuestra.
A diferencia de lo que aparece en las películas, los insectos perciben una imagen bastante precisa de la realidad, aunque muy pixelada, de modo que pierden los matices para detectar las figuras en movimiento.
En cuanto a los caballos, ellos tienen una increíble amplitud de visión, exceptuando lo que tienen delante de sus narices. Literalmente no pueden ver lo que está situado entre sus ojos, debido a su visión binocular. Eso explica que suelan mirar al suelo cuando caminan.
experiensense 2012
Por años los científicos creían que los animales no diferenciaban colores y mucho menos que reconocían su imagen en el espejo. Sin embargo, ahora ya sabemos que dependiendo la especie y sus necesidades ellos son capaces de ver, percibir colores y formas en combinación con otros sentidos.
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